abril 19, 2010

Scrambled eggs


¿Qué hubiese pasado si The Beatles hubieran fenecido en el 59 en el avionazo con Buddy y Ritchie?, ¿o en el pináculo de su carrera?, quizá en el 67 con Sgt. Pepper´s Lonely Hearts Club Band. A veces me pregunto cómo serían los legados de Ritchie o Buddy y me entristece que jamás los conoceré; pero después me consuela pensar que ha sido una gran bendición haber nacido en la segunda mitad del ajetreado siglo XX, contar con una capacidad auditiva regular, que a mi padre le haya tocado nacer en los 40´s para que fuese un adolescente en la década del 60 y que haya tenido el corazón y la sensibilidad para saber apreciar la magna obra de The Beatles. Agradezco el hecho de que fue una gran influencia para mi y me haya contagiado ese amor por la música; pues desde pequeña pude apreciar la magia que tiene ese cuarteto de Liverpool, cuando la primer canción que descubrí en un momento misterioso y coincidente fue “While my guitar gently weeps” al asomarme debajo de la cama de mis padres y poder observar el gran legado de rock&roll que años después me heredaría; recuerdo bien el momento, hasta hoy lo considero una revelación, un instante que marcó un hito en mi vida, en mi persona, en mi camino y que definió mi destino sobremanera.

Los acordes dolientes de George me atraparon, secuestraron mi alma acariciándola plácidamente para jamás volver a ser quien antes era.

Agradezco el azar que me llevó a escucharlos desde niña, y no haber crecido sin conocerlos para no juzgar estúpidamente toda su obra por sus pops songs como “Love me do”, “She loves you” o “I want to hold your hand” (las cuales también merecen mi respeto, pero me gustan más los Beatles bajo el influjo de las drogas), pues si me hubiese tocado conocerlos ya adulta y a ese grado de superficialidad quizá los hubiera prejuiciado como mucha gente lo ha hecho, tan sólo por la flojera que implica el enfrentarse al placentero trabajo de escuchar toda su obra para ser digna de emitir un juicio sobre ellos.

Agradezco todos esos sentires que me han llegado a través de sus notas; Beatles han fungido como un soundtrack a través de este largo caminar que ha sido mi vida.

Cuando me he sentido agobiada, desesperanzada o deprimida siempre recurro a ellos, y todo mal se disuelve en la ternura de Winston, el carisma de Richard, el misticismo de George y el talento de James.

Todavía considero blasfemia definir cuál es mi Beatle favorito, cuál es mi top 3 de sus discos o mi top 10 de sus canciones; no obstante puedo decir con enorme respeto que las que se acercan a ser mis favoritas y que han marcado mis días sobre esta tierra son: “While my guitar gently weeps”, “Happiness is a warm gun”, “Golden slumbers”, “Help”, “In my life”, “A day in the life”, “Eleanor Rigby”, “Nowhere man”, “I´m so tired”, “Blackbird”, “I´m a loser”, “I´ve just seen a face”, “When I´m sixty four”, "Here, there and everywhere", "You like me too much" y "I'm only sleeping".

Puedo afirmar que uno de los sucesos que han valido la pena del monstruoso y plagado de barbarie siglo XX ha sido la existencia musical de ese cuarteto prodigioso. Quizá suene absurdo, prejuicioso y hasta xenófobo, pero las personas que saben admirar y apreciar la música de The Beatles les ofrezco mis respetos y l@s considero inteligentes y sensibles.

Tengo algunos amigos que han significado mucho en mi vida y el lazo que nos unió en un principio fue precisamente una nota de The Beatles; el primero de ellos fue un muchacho que amé y que representaba todo lo que buscaba en un humano, era Beatlemaniac, tenía un corazón muy noble y sonrisa encantadora; recuerdo que cuando nos conocimos no dejamos de hablar, recuerdo la fogata, el amanecer, lo reflexivo de la noche, la magia que circundaba nuestros seres y aquella navidad del 97´, solíamos brindar grandes conciertos a las montañas de Tecate, él acompañándome con su guitarra y yo emitiendo ruidos de colores. Un hombre excepcional con el que hablaba de todo y que... vestido de blanco le conocí, todavía recuerdo el sentimiento de no tener el permiso para ir en año nuevo, lloraba y lloraba cual tormenta en desierto, ... finalmente me dejaron ir y fui muy feliz..., Beatles es la mano que me unió a ese amigo tan querido. Shavita.
Cuando conocí a Maurye Skywalker me encontraba en un bar de Tijuana llamado “5to patio”, corría el año del 2002 y en ese momento una banda llamada 4eli tocaba el cover “Don´t let me down”, él me vio cantarla emocionada y fue así que emitimos nuestras impresiones sobre The Beatles; lo demás es historia.

Fue la misma razón por la cual Dany Reveles y yo hemos sido grandes amigos desde que nos supimos Beatlemaniacs, al grado de pasar noches enteras charlando sobre detalles de sus vidas, discutiendo la genialidad de ciertas notas o la agudeza que implica algún acorde, si éste fue accidental o no, tal como el que hace George al inicio de “I feel fine”.

¡Cuántas Beatle sessions!, ¡cuántas anécdotas!, ¡cuánta alegría sabernos partícipes del azar extraordinario que implicó que cuatro personas distintas hayan chocado en sus existencias para hacer regalo tan bello a la humanidad!

Cuando conocí a una de mis mejores amigas, mi amada Dulce, ella me escuchaba entonar alguna que otra canción de ellos y me pedía que le cantara porque siempre he alardeado que la canción que me pregunten la conozco; y fue a partir de esas pequeñas beatle sessions en el Rubí, que decidimos hacer una banda de rock, la cual me ha dejado los más grandes momentos de mi vida, muchísimas borracheras, viajes y diversión; además el conocer a grandes amigos, entre ellos una persona muy especial a la que le guardo mucho cariño y respeto, Sal Saucedo.

Pero lo más extraordinario que me ha dejado sucedió en una mini gira por Tecate, Ensenada y Tijuana en donde conocí a un músico, filósofo, rockero y beatle fan, una persona que se ha convertido en mi ser favorito en la historia del universo, a la que amo y admiro sobremanera; sobre todo porque el detalle de saber que era beatlemaniac me hizo desear estar con él para toda la vida. El día que unimos nuestras manos por siempre y le hicimos reverencia al cosmos y a la vida le canté “In my life” con mi alma al desnudo.

Beatles son una parte primordial de lo que constituye mi ser, creo que me seguirán acompañando el resto de mis días y si algún día se da el milagro de procrear un ser humano me gustaría que al momento de asomar por primera vez a este mundo, lo primero que escuche sea “Sun king” o “Love” de Lennon.

No puedo imaginar el día que muera el último Beatle, creo que una era va a terminar.

Alguna vez soñé que en un pequeño y escondido barecito ubicado en el Blvd. Insurgentes de Tijuana (el cual nunca existió), tocó The Beatles, fui a verlos y cuando terminaron pasó por un lado de mi el Sr. John Winston Lennon, le extendí la mano y él sonriendo la tomó suavemente, le dije “Gracias” y una lágrima rodó por mi mejilla.

Otro sueño que mi espíritu todavía recuerda es el siguiente: en ese entonces tenía 14 años, me encontraba estudiando la secundaria y en mi salón tocó The Beatles (puedo presumir que a esa edad ya había escuchado todo su legado), pero lo sorprendente fue que les escuché tocar una canción bellísima, genial, de un sentimiento tan puro y de un feeling entre blues, rock y balada que al oírla me estremecí, mas cuando desperté me di cuenta de que esa canción tan clara a mi espíritu no se encontraba entre su repertorio, por lo que mi sonrisa y felicidad fueron indescriptibles, pues había presenciado una canción inédita que solamente yo en la historia del universo hube de escuchar, y que fue mágica. Si habría tenido el talento musical hoy aun podría describirla o quizá en aquel amanecer de lucidez la hubiese podido cantar.

No sé qué daría por haber presenciado el concierto de Rose Bowl de The Beatles. De cualquier forma agradezco a más no poder haber nacido en el siglo XX y me siento inmensamente honrada por haber tenido la suerte de haber escuchado el regalo más glorioso que el cosmos y el azar tuvieron a bien hacer nacer.

Si algún día tengo la fortuna de ver de frente al Sr. Richard Starkey o a Sir Paul McCartney me acercaré sigilosamente a ellos, los miraré a los ojos, les daré la mano, diré ¡gracias por tanto!, una lágrima rodará por mi mejilla, un escalofrío recorrerá mi ser y me retiraré completa.

Cuando muera me gustaría ser enterrada con “Happiness is a warm gun”…

Si pudiera hacer un disco perfecto de The Beatles estas serían las canciones que eligiera: Y le pondría como título:

Scrambled eggs Part I

1. You won´t see me
2. Tomorrow never knows
3. A day in the life
4. The long and winding road
5. I´ve got a feeling
6. Not a second time
7. Oh darling!
8. Please Mr. postman
9. I me mine
10. There´s a place
11. For no one
12. Cry baby cry
13. You never give me your money
14. Ask me why
15. Two of us
16. Something
17. Till there was you
18. Sun king
19. Mother´s nature son
20. I feel fine
21. Mr Moonlight
22. Real love
23. Free as a bird
24. Tell me why
25. Here, there and everywhere
26. I need you

Scrambled eggs Part II

27. Misery
28. With a little help from my friend
29. Yer blues
30. Long long long
31. Julia
32. It´s only love
33. It won´t be long
34. And your bird can sing
35. I´ll follow the sun
36. You like me too much
37. Dig a pony
38. All my loving
39. I´m down
40. Rocky raccoon
41. I should have known better
42. Yes it is
43. The end
44. Sexy sadie
45. Bad boy
46. Tell me what you see
47. I will
48. Sgt. Pepper´s Lonely Hearts Club Band
49. I´m only sleeping
50. She´s leaving home
51. The fool on the hill
52. When I´m sixty four
Y el pilón: Revolution #9

2 comentarios:

Dan dijo...

Hey, yea, Viva the Beatles!!!

Yo una vez soñe que tocaba con ellos en la sesion del video Hey Jude. jajaja, has sido mi mejor sueño hasta ahora.

maurye dijo...

Dr. Pepper Lonely Hearts Club Band !
Yeah...memorable noche @ quinto patio.
Gracias George,Paul,Ringo,John...