Crónica de mis pequeñas y azarosas desgracias tecnológicas

Nadie me quiere creer, algunos arguyen que es producto de la casualidad, pero a lo largo de mi vida me ha sucedido lo siguiente:

-Intenté instalarle internet a mi computadora vieja y lo logré, pero también hice algo que por más que he intentado no sé qué es que jamás podré instalarle de nuevo internet.

-Fui a un café internet y mandé imprimir, cuando de repente la señorita me dijo que se había atascado el documento y tendría que esperar un rato.

-Quise sacar un juego de copias en la dirección de la escuela donde trabajo y atasqué la máquina al grado de que le tuvieron que mandar llamar al técnico.

-Introduje una película en formato VHS a la video y no sé qué bótón presioné que la película ya no salió, luego quién sabe cómo la extraje y ya no volvió a funcionar.

-Me prestaron un carro por algunos meses y no duraba mucho tiempo sin fallar.

-Conseguí un carrito viejo y no sale del taller.

- Ayer una amiga me tomó fotos y la cámara se trabó, me dijo que nunca le había sucedido tal percance con su cámara.

-Usé la cafetera de mi casa y comenzó a aventar humo y a hacer un ruido extraño.

-Hace rato fui a tramitar el permiso para viajar a L.A. y la puerta electrónica con clave a la entrada de la garita vieja se trabó, el oficial se molestó y me dijo que pasara por la puerta manual.

- Mi computadora se traba a cada rato.

-Dejé mi celular arriba del carro, arranqué y salió volando.

¿Quieren más pruebas de que algo tengo con la tecnología que cuando me acerco a ella empieza a fallar?

-Casi todos mis bolígrafos terminan o no rayando (aunque tengan tinta) o quebrados de algún lado.

-Encendí el foco del patio trasero e hizo corto, ahora ya no puede haber luz atrás porque el corto vuelve a suceder y cada foco se funde.

-Juro que la vez pasada que fui a "Magic" mis amigos y yo nos subimos al juego "Batman" después de hacer una hora de fila aproximadamente, el carrito se descompuso y nos invitaron a bajar del juego porque llamarían a la técnica.

-Regularmente todo lo que sea de metal me da toques.

-Para poder ver este episodio de "Candy Candy" tuve que pinteármela de la secu, después de acostarme en camita con mis galletas y mi leche, que se va la señal del canal y no pude ver el capítulo.

-Seguido me ocurre que del tostador sale pan quemado (sin siquiera subirle a la temperatura).

-Cuando voy al cajero mi tarjetita de pago no agarra a la primera, a veces he tenido que cambiar de cajero.

-No sé a qué le piqué al celular de mi tío que le consumió todo el crédito que previamente le había puesto.

-Me instalaron un esteriecito en mi carcacha, y cuando el técnico lo caló funcionó perfecto, pero avancé algunas rodadas y parecía muerto, pasé así un buen rato queriendo encontrar la falla hasta que le hallé una maña.

-Le envirulé la compu a mi hermano.

-Me prestaron un USB y fui culpada de haber perdido la tapa (pero no fui yo, al final salió el responsable).

-Estaba en una sesión con la dermatóloga y que se va la luz.

-En la escuela donde trabajo seguido me pasa que los salones en los que quiero usar cañón están descompuestos o se descomponen justo cuando yo llego.

Y la lista seguirá engrosándose.

De todo esto hay testigos que pudiesen dar fe de mis pequeñas y azarosas desgracias tecnológicas.