marzo 09, 2011

Como si todo mi ser no tuviera un sostén, como si el suelo que me dejaba estar ya no se detuviera, derrumbándose pedazo a pedazo hasta dejarme desnuda. Me duele ser en sí, me desconozco, no me encuentro.

Jamás me había sentido tan vulnerable, con ganas de envolverme en un trapo y ahí quedarme. Jamás había desconocido el cuerpo en el que vivo, querer renuciar a él y volar muy lejos, jamás... Jamás había querido escupirme y ahí embarrarme, arrastrándome en el suelo, volviéndome basurita de viento para quizá disolverme perenne en la nada.

Sorprendente es cómo la vida nos lleva a tocar fondos tan extraños, inesperados, no buscados; sorprendente que vamos cuidando paso a paso y de repente una marejada de pensamientos nos aplastan, nos zambullen y destruyen. Qué fondo toco si no es mi propia identidad, una vacía, sin piso, sin estas letras que poco a poco la distancia las va alejando de entre sí M ............... i .................................r..............................i..........................a................................m..................................., qué fondo toco si no me hallo, si soy un fantasma dentro de un fantasma.

No quiero perderme, no quiero que la magia se desdibuje, no quiero esta tristeza, no quiero disolver ese brillo que unos ojos y una risa le daban a mis días.

2 comentarios:

Serafhin dijo...

La magia no la perderás, ya es inherente en ti. Es en estos momentos en que no tienes nada que perder y mucho que ganar... o ganarte... porque perdida ya estás jejeje...
Ánimo... lo más difícil es ser sincero con uno mismo... una vez logrado eso, podrás conectarte con el mundo y con los demás...

Eleanor dijo...

Gracias corazón, tú le das ánimo a mis días, me enseñas mucho.

¿A veces hay que vivir un poco esto no?, nos renueva, nos hace pensar, nos hace aprender, nos jala las orejas para no cagarla tanto.