julio 14, 2019

Dormir la siesta y el infierno

Cuando duermo la siesta, he de descender al mismísimo núcleo de los infiernos, perderme en los páramos de la nada, flotar perenne en el nirvana, y únicamente así, habré de recobrarme, volver a unir las piezas, de esto que soy, de este saquito de huesos y carne con ojos bien abiertos.

No hay comentarios.: